Al final he llegado hasta donde he podido. No es mucho, no es suficiente.
Pero es lo justo.
Las presencias se acaban.
Las huellas se borran.
Las palabras se olvidan.
Y sólo queda el aire de un recuerdo, y el tiempo anula todo, incluso los afanes mejores.
Una vez hubo una voz perpleja por aquí que ya no está, no está.
Bienvenido. Aquí encontraras apuntes, bocetos e impresiones de una mente atropellada, y son fruto del momento en que fueron expresados. No hay verdades esenciales excepto las del instante concreto: por eso las mantengo. No te enfades si te hieren o parecen injustas pues seguramente lo sean de alguna manera. Aquí se quedan como hijos frustrados. Intenta disfrutar, el objetivo es que algunas palabras y frases te entretengan. Entra.