Salir a la mañana del verano joven, la brisa, la fragancia.
Salir con la piel refrescada al sol primero, los olores, la luz.
Salir con pie nuevo nuevos pensamientos, qué daría yo no sé
por volver a salir a la mañana
sin miedo, sin piedras
que cargar.
Los sonidos vivos y secos como siempre debieron ser. Qué daría yo, no sé, por pisar la hierba húmeda y hermosa de la mañana del verano joven.
Bienvenido. Aquí encontraras apuntes, bocetos e impresiones de una mente atropellada, y son fruto del momento en que fueron expresados. No hay verdades esenciales excepto las del instante concreto: por eso las mantengo. No te enfades si te hieren o parecen injustas pues seguramente lo sean de alguna manera. Aquí se quedan como hijos frustrados. Intenta disfrutar, el objetivo es que algunas palabras y frases te entretengan. Entra.