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INSUFRIBLE ENFERMEDAD

 

Llevamos años sin reaccionar a la propaganda institucional que promociona las peores podredumbres, morales y sociales, dejando que infecten a los sectores indefensos (por ignorancia y degradación). Y hay que romper la maraña y expulsar la insanía del centro a el perímetro y luego fuera, donde siempre estuvo. Hay que volver a la Razón.