Lo inmutable a través de las generaciones es conservar la tradición y perseverar en el legado. Sin fisuras ni debilidades, perfeccionando el desarrollo humano a través de los siglos sobre cimientos sólidos generados por la experiencia compartida y la propia contradicción de cada época. Cada vez mejores en una labor de toda la humanidad.
Todo ha saltado por los aires sin remedio. De esta demencia vanidosa y sentimental saldrá un mundo nuevo, absurdo, desprovisto de lógica. La pérdida es inmensa.
Viene el caos.