Cielo encapotado con lluvia intermitente. Bendita frescura del ambiente.
Corazones encogidos, a pesar de todo. Las almas gritan desesperadas, no hay líderes, sólo déspotas.
Cielo encapotado, como esta vida. Nadie reclama el agua y entonces se desperdicia. Triste regalo despreciado, triste el hombre que sigue seco a pesar de todo. Habiendo agua se esperan secos allá donde las leyes no les protegen.
Lluvia intermitente y serena, bendita frescura en el ambiente.
Llevad el agua donde la necesitan, miserables, no la tiréis.