Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2009

LAS FUERZAS VIVAS II

Este título, que lo puse en otra entrada a raíz de la victoria de Obama en EE.UU., viene a colación porque, en el ínterin, Obama demuestra una vez más que no es posible esperar nada aunque los hombres parezcan mesiánicos, un maná correcto. En lo poco que lleva el tipo ha demostrado una cierta dejadez, muchas palabras bonitas, algunos gestos feos y la sensación de que la nave sigue a la deriva. Resultando así que, sin llegar a la idiocia perfecta de nuestro ZP, el americano es un pálido reflejo de un hombre grande, al que olvidaron rellenar por dentro. Rellenar de materia gris y de altura, porque el barniz exterior lo traía muy bien acabado. -¿Y ahora qué?- Preguntaban en la película. Pues ahora nada, a seguir nadando en las palabras hermosas...

VACÍO

Hay un hedor nauseabundo que vive en el ambiente y no se acaba. Hay una persistencia de la podredumbre creciendo siempre cerca de nosotros, y nos preguntamos a quién reclamar, de dónde la pestilencia. Pues es bien sencillo: Es nuestra, de nosotros mismos; no se trata de pensar que Dios está muerto y olvidado, o que Alá o Yavé o las chifladuras varias de las sectas antiguas y nuevas han caído, es que bajo el manto de honestidad y las palabras que nos adornan existe lo que podría llamarse el miserable esencial, que es aquél que se recubre de una pátina moral pero que en el fondo vive dominado por apetitos y deseos irrefrenables. Los demás, realmente, no importan, no cuentan. Es el tiempo del Yo supremo como rey de la creación, la individualidad que siempre se escondía pero que quedaba en segundo plano ante la honestidad de muchos. Hoy éstos se retiran a un lugar sin nombre, y vivimos pensando que el sueldo de fin de mes o la cuenta corriente es lo importante, sea como sea, la consigna es

BUENO Y LIBRE

Mamadú, eres un buen hombre. ¡Qué bien que estás por aquí, amigo, amigo siempre! Que de cerdos estamos llenos, en este país a la deriva. Libéranos de nuestra opulencia, enséñanos a bajar la fiebre. Mamadú, quédate con nosotros, vigila la calle, quédate en Marbella, mirando, vigilando. Tanta miseria, tanta miseria... Hombre grande, libre, entero. (Mamadú, inmigrante sin papeles, recogió a una niña en la calle a la que su padre había dejado abandonada en su coche mientras él, sucio inútil, pagaba a una prostituta y se emborrachaba. A pesar de su situación, este hombre no dudó en llevar a la niña a la comisaria).

LO QUE SOMOS

Somos fieras, talibanes, integristas, intolerantes, cavernícolas, rancios, fachas, antidemocráticos. Somos la nueva fiera dictatorial. Tenemos el germen de la desgracia, somos la bestia, los hijos de la hidra asesina, los beatos atrasados e incultos, somos el pasado. Cristo ha muerto dos veces. Somos gente con ideas, igual que tú. Que tú. No me hables de progreso, llámalo egoísmo; ríe tu ignorancia y tu falta de moral, no eres más que carne hambrienta de lujuria, un cuerpo sin vida. Por eso deseas matar, matar, matar. Somos la bestia, esa que no podrás extirpar en tus noches negras, hijo de Gramsci.