APUNTES PARA UNA VIDA MEJOR (DE CASI TODOS)

  En este mundo deforme y monstruoso, tu único ejercicio de libertad es elegir bajo qué mentira quieres ser anulado como persona. El resto es sabido, trillado, sin matices. El resto es la masa.

  Demasiadas veces lloramos lágrimas perdidas sabiendo que hay que mirar hacia delante.

  Desde hace tiempo hay muchas personas en España que deben elegir entre vivir bien a costa de alterar lo prometido o cumplir con su deber y su responsabilidad objetiva; sólo hay silencios inquietantes. Por desgracia, si nos vamos a la Historia, los precedentes invitan al pesimismo: vivir bien. El invierno avanza, nada lo detiene.

Siempre se puede argumentar con apariencia de objetividad y lógica exacta en todos los sentidos. Fíjate bien.

  El problema es que no tienes capacidad para reconocer lo que está bien escrito y diferenciarlo del engaño. Te educaron mal y te recomiendan mal para promocionar -groseramente- lo que interesa a sus propósitos. Y entonces millones como tú invierten en pésimos escritores mientras los pocos que merecen la pena ven sus libros ocultos en esquinas poco propicias. Busca las esquinas y llegarás a comprender lo que es bueno y, sobre todo, evitarás el fraude. No es culpa de nadie, a fin de cuentas se lee en ratos perdidos, cuando se lee. Lo cual es triste y empobrecedor.

  Crees ser lo que fuiste y no serás. Vete.

  El mundo, hastiado, persiste en la extinción. Un vacío moral absoluto impide la marcha atrás. Ocurrirá pronto, según está escrito.

  A veces sale, a veces no: ese es el juego.

  Porque la respeta, obedece. Porque la quiere, la defiende. Porque la ama, acepta la soledad y el abandono. Porque tiene alma, calla. Porque tiene vigor, aguanta. Porque es héroe duro, vive. Porque la verdad no la sabemos,  ni la queremos conocer, si ya inclinamos en reverencia, -la cabeza expuesta- nuestro saludo admirado  al hombre de once años ya formado, ya listo para enseñar que cuando quieres sin adornos, sin vestidos, sin palabras todo se perdona y olvida. Lecciones, enseñanzas, aires de voluntad eterna. Será mentira y tendrá matices: es mejor así el Amor. No existe sin grandeza. El Amor.

  Este niño de Nersac, de 11 años, viviendo solo como un perro entre extraños y resistiendo como un hombre digno, responsable, gigantesco en su valor, ha sido para mí un ejemplo de auténtica grandeza y descomunal ansia de no perder el orden ante la tormenta. Quisiera yo que este ángel estudioso, cuidadoso y persistente en su responsable actitud vital tuviera una vida plena y dichosa, porque su genio nos retrata. Me lo imagino en la noche quizá llorando, quizá estudiando en la oscuridad, quizá con miedo desamparado, ese miedo que derrumba el alma y seca la esperanza, y cualquier otra hazaña se queda insignificante, ridícula, grotesca, indigna. Y creo firmemente que Dios lo mira y sonríe, y cuando le gritamos por nuestras pequeñeces nos muestra a este valiente con una sonrisa orgullosa y, sin decirlo, nos mira con una expresión que dice "Mira y aprende, y bésale y protege su ejemplo, porque este niño, solo durante dos años, sin nadie que le atendiese y alimentase, ha ido a clase lim

  Cuando Lucifer nos observa y es feliz. Es feliz...

  Mi ruina es endémica, estructural, estática, asentada y permanente. Vamos a por el bingo.

  (Y la vida es una broma maravillosa)

  ¿Y dónde se compra el equilibrio? ¿A qué precio? ¿Cuánto necesito? Ayes en el runrún del precipicio...

  No se combate la pobreza con imbecilidad, ni los desequilibrios con ensoñaciones dementes. Si se respetara el legado de nuestros predecesores y se siguiese con afán de dar un paso más en la dirección que marcaron durante siglos y siglos, habría evolución y resultados. Con lo que hay ahora, no cabe otra cosa que la degradación y el declive acelerado. Esta viñeta de Tintín (sí, Tintín) lo dice todo. Una ciudad europea de hace no tanto: fíjate bien.

  Salgo a la calle y no veo una sociedad fuerte, cohesionada, íntegra y reconocible. Veo rebaños resignados y perdidos en lo que una vez fue un país compacto. Y, como lo veo, te lo digo para que no me vengas con la monserga de que todo es igual que siempre. Estamos muy lejos de todo.

  Una silueta simple y tenue silbando en la noche y apenas perceptible bajo los focos mortecinos de la luz municipal que no puede iluminar el rastro incongruente con la severa madrugada excepto para mostrar que es un hombre alto y delgado pero el resto es oscuridad plena y desprovista de unidad sobre el suelo húmedo y brillante que soporta un peso callado y mudo en una calle larga por donde la silueta carente de atributos va alejándose en su misterio sin que el ojo pueda discernir de quién se trata esta vez o de la utilidad de sus pasos en la distancia ya significativa.  Finalmente se vacía y aquieta la noche sin que sepamos dónde iba y con qué propósito. Haz la foto y volvamos a casa.

  Resultó que todos negaron haber estado allí, y realmente es curioso y extraño, porque estuvieron todos sin excepción. La caravana siguió su ruta, nadie hablaba. Nadie se quejaba. Nadie.

  95 años de Tintín y todavía hay quien sigue sin comprender nada. No importa.

  Escribir es un acto bochornoso y estéril. Me encanta.

  Suave brisa del desastre que planea sobre todos... ay, España, España...

  Sus situaciones soñadas son mi pesadilla. Qué hacer.

  El regalo es la vida. Buena o mala.

  Inolvidable frase. Al menos para mí.

  Ah, dulce estruendo del hundimiento, suave podredumbre del fracaso... venid a mí los perplejos de mañana. El árbol no da frutos.

  Despierta y sal fuera, es hora.